ROTO

 Algo se rompió anoche, no he podido repararlo, lo botaré a la basura y conseguiré otro nuevo.

HOY

 Hoy sólo quería decir que encontré, (no importa dónde), un párrafo cursi y simplón que me gustó; porque sí, a veces soy así, cursi y simplona. Sin embargo cuando cito «algo» que no es de mi creación, prefiero mencionar al autor y poder así brindarle un pequeño «homenaje»; ahora en cambio, no sé quién escribió esto y creo que por hoy se puede ir al diablo... Y dice así:


En resumen, el amor cuando se acaba duele. Duele en la tripa, en el pecho, en los dientes, en las sienes... El sufrimiento físico es real y puede alargarse durante meses. ¿Las buenas noticias? El dolor es una parte natural de ese proceso de «curación», un síntoma de que te estás «desintoxicando».

Para el que lo lea y sepa quién lo escribió se puede ir al diablo por hoy también.

TODO HA CAMBIADO

Luego de una batalla sin tregua, 
deseo recuperar mi pasado, 
sigo aferrada a él.

Deseo más mi soledad 
que tu compañía, 
la quiero de vuelta
mis ganas de vivir, 
quiero mi estúpida vida aburrida.

Por qué viniste y me asaltaste,
me robas todo lo que aún tengo,

me endeudas, 
me ahogas, me destrozas.

CON TU AUSENCIA

No, hoy no tengo nada. Nada más que miles de pensamientos entreverados que aún no quieren salir. Sólo hay una angustia que me ahoga y me encanta. 

Junto, en mi mesa, una taza vacía, no hay más café, hace mucho que ya no lo necesito.
Libros tirados y devastados que interrumpen mi escape pero que por hoy, no quieren ser leídos.
Hacia el fondo una estantería llena de chucherías, trofeos, reconocimientos y fotografías, nada sin valor, nada.
Mi cama vacía, que al igual que mi alma, muestran vestigios de que alguien estuvo allí, tal vez yo o tal vez alguien inventado.
Es paradójico, sólo tengo un aroma impregnado en mis manos, el jabón de tocador que compré ayer no lo ha logrado sacar.
La radio toca música horrible que me recuerda a algo o a alguien: mis discos favoritos, viejos y ochenteros y entre pausas se oyen recuerdos de que debí salir hace semanas.
Por la ventana, a lo lejos, se distingue como el frío congela y mata todo, ha logrado empañarla y resquebrajarla.
La lámpara apenas alumbra mi rostro, noto el cansancio y las ojeras que me maquillan.
Miro alrededor una y otra vez, pero no hallo nada de valor.
El reloj de pared que me obsequiaron el año pasado, siempre puntual, con ese horrible anaranjado pálido de fondo, siento náuseas, no recuerdo quien me lo dio pero deseo hacerlo.
Casualmente siento una mirada, una mala broma que mi mente pretende gastarme.

Y en esta noche sin valor, donde no hay nada ni nadie más que yo y tu ausencia, mi soledad me cuenta y me dice entre lágrimas que no le agradas y que me extraña.

DE MI PARA MI

Muy poca gente me conoce, generalmente me juzgan por mi apariencia, tienden a hacerse una vaga idea de que soy alguien apacible, sin carácter tal vez, me es muy lamentable que mis facciones no demuestren mi naturaleza.
Por ahora no paso por un buen momento en mi vida; es de esos, los que presuntamente te enseñan a ser mejor persona, de esos en los que debes aplicar el "si te caes, debes levantarte" y todos esos clichés estúpidos para subir mi cada vez más invisible autoestima.
Hasta ahora sólo he aprendido cosas malas, ¿Dónde está el lado bueno de esto? Puede ser que esa sea una pregunta capciosa o sólo una burla a mi estado. Lo confirmo porque lo he visto desde distintos puntos: desde una cristiana abnegada hasta a una renegada atea; desde la más optimista hasta la más pesimista.
Muchos dirán que uno sufre porque quiere, pero ¿Dónde está mi voluntad de sufrir?
Cuando todos te dan la espalda o simplemente viven sus vanales vidas, me doy cuenta que quizá aprendí mal, probablemente me hice dependiente de las personas que me rodeaban, acaso espero recibir a cambio eso que di o tal vez sólo quiero alguien con quien hablar, ¡Ay, pobre idiota que soy! 
No quiero ser una tonta dramática y dejar a entender mi próximo paso: un teatralizado y muy bien elaborado suicidio, pero creo que lo soy, si a alguien debo criticar, si debo esperar algo o confiar en alguien, es en mí.

LA VIDA ACTUAL Y LOS CONSEJOS QUE ME DIO

Si naces pues tuviste suerte, nos es muy fácil hacerlo hoy en día y si lo haces pues no esperes a tener una familia ideal, sólo trata de aprender lo esencial para poder sobrevivir, aunque será un poco duro hacerlo de una adolescente o una mujer soltera ocupada que trabajará durante el resto de sus días porque lo más importante es el dinero, debes recordar muy bien eso.

Debes socializar con las personas con las que te topes, nunca sabes cuándo te podrían ser útiles, no te encariñes con ninguna, todos son despreciables, que como tú, sólo se aprovecharán de los demás.
Ve a tantas reuniones sociales puedas, que no te importe nada más que ser popular, lo demás es basura y como tal, debe ser eliminado, sólo deja que tus instintos salgan a flote, ¡No los controles jamás!
Busca un ídolo cualquiera, alguien a quien adorar e imitar, uno que este a la moda seria genial.
Olvídate del amor y esas cursilerías, eso no existe, aquí sólo hay sexo casual.
Jamás dejes a la tecnología de lado, sustituirá tu inteligencia, esa no la necesitas para nada en este mundo.
La privacidad es cosa del pasado, da a conocer al mundo entero la clase de persona que eres, alguien superior, expón a los tuyos de forma liberal.
Drógate con algo o vuélvete alcohólico, has algo importante con tu vida, pero éstos son los mejores ejemplos para hacerlo.
No te olvides de elegir una carrera competitiva y ser competitivo, sitúate en la cima de la cadena alimenticia, desangra a quien sea en tu camino de convertirte en el próximo Dios, tal vez seas tú al que todos necesitan adorar y creer para hallarle sentido a sus vidas porque ya andan demasiados perdidos.
¿Sueños? A quién le importa esas tonterías, sólo tienes que ganar dinero, lo demás vendrá después.

Si te sientes inmensamente infeliz pues busca desesperadamente a tu media naranja porque simplemente la soledad actual es más agresiva en comparación hace algunos años.
Si no quieres tener hijos pues ya sabes, aquí tu razonamiento no juega ningún rol, sólo diviértete, esos pequeños problemas pueden solucionarse.
No les busques ningún sentido ni lógica a este mundo actual, nada tiene valor y si lo tiene, recuerda, tenemos dinero.

SOLO IBA A SER UNA NOCHE MÁS

Recuerdo aquella noche, quedó grabada en mi memoria y me marco para toda la vida. Todo estaba a punto de terminar, dormiría unas horas más, qué gran felicidad la mía, me acompañaba un gran amigo, que estaba allí sin ninguna obligación, él sólo quería acompañarme o tal vez deseaba llenar esa pequeña soledad de la que de vez en cuando somos presos.
Todo iba a acabar con normalidad, vaya, hasta ahora deseo eso y que aquello jamás hubiese ocurrido.
El reloj demostraba una vez más su dominio, ya eran las siete de la noche y la calma era inevitable.
Llamaron a la puerta, una madre traía en sus brazos a una pequeña, no superaba los tres años de edad, debo admitir que la mujer me era muy familiar, hasta ahora no sé por qué; la recostó en la camilla y la descubrió, lo que alcancé a ver ya no era una niña, era nada más que un cuerpo moribundo que quería descansar.
Fue la única vez que realmente sentí miedo, sorpresa y desesperación, pensé que me había acostumbrado al trajín del día a día: gente muriendo, gente naciendo, sólo gente.
No supe qué hacer en ese momento, cómo reaccionar. ¡¿Qué se suponía que debía hacer?! Frustrada sólo atiné a reñir a la mujer por el muy mal estado de su hija, ella tenía la culpa y para mi siempre la tendrá.
Aquella noche fue muy larga, atendimos a la niña; tenía el pensamiento que la salvaríamos, pues que equivocada estaba, los ojos del médico de guardia sólo decían: unas horas más, sólo unas horas.
La escena para mi fue muy lamentable, digo para mi, porque al estar ya acostumbrada al sufrimiento de la gente, debió de ser un acto muy fuerte para lograr conmoverme de esa manera, era sólo una niña que no pasaba de los tres de años de edad, con miles de aparatos invadiendo su cuerpecito.
La mujer estaba a su lado, desesperada, pero con esperanza, la misma tonta esperanza que hizo que la llevara en ese estado al hospital.
Era obvio lo que venía a continuación , tan obvio que jamás lo pensé, finalmente la niña se cansó de respirar, sobrevino el paro cardiorespiratorio que nos llevará a todos y cada uno de nosotros a la muerte y así como se la llevó a ella, algún día vendrá por mi.
La mujer quebró en llanto, era su hija después de todo, en ese momento recién pude ver a una madre que lamentaba la perdida de su hija; vi a su familia llorar, nadie más lo hacia, todos estaban apenados, se notaba en sus caras, pero nadie lloraba... yo era la única.
Creo que son muy pocos los que pasan por esa experiencia de ver un cuerpo moviéndose, con algo especial dentro, que de un momento a otro deja de tener ese movimiento, siendo entonces solo materia.
Tan acostumbrada estaba que aquella fue la primera vez que llore una muerte, que realmente la lamenté, había sido tan fría conmigo misma porque era necesario, trataba de sentir algo cuando una persona dejaba de existir, pero era obligarme a sentir algo que no podía, pero aquella niña que no superaba los tres años de edad me enseñó a sentirlo.